Existe un largo recorrido desde el nacimiento de Internet hasta llegar al uso cotidiano que hacemos de él todos los días. La primera página web de la historia hoy no tendría éxito porque lejos está de las tendencias y buenas prácticas actuales. Sin embargo, gracias a ella existieron todas las demás.
Internet nació en los años 60 y por aquel entonces, todavía faltaban años para que Windows o Google fueran palabras conocidas. Incluso en los años venideros, los ordenadores o computadoras que fueron apareciendo no gozaban de la velocidad ni las facilidades visuales en comparación con los que se fabrican en la actualidad.
La web como la conocemos hoy, tiene como su principal antecedente a la World Wide Web (www), una aplicación desarrollada alrededor del año 1989 en la Organización Europea para la Investigación Nuclear, mejor conocida como CERN, en Ginebra (Suiza), con fines muy orientados a la comunicación entre científicos.
La puesta en marcha de la primera página web de la historia, le debe mucho al físico detrás del proyecto: Tim Berners-Lee. La primera página web de la historia no tenía muchos colores ni mucho menos: fotos, audios, videos o imágenes. Era solo texto e hipertexto.
En el marco de la conmemoración del trigésimo aniversario del desarrollo de la WorldWideWeb, un grupo de desarrolladores y diseñadores se reunió en el CERN para reconstruir el navegador original y ponerlo a disposición de todos. ¡Ya es posible viajar en el tiempo y recorrer los inicios de las primeras páginas web!
El camino tampoco termina hoy
Los orígenes de este largo trayecto ahora posibilitan a millones de personas estar conectadas y poder expresarse de forma online de diferentes maneras. Por supuesto, las páginas webs son algo diferentes hoy en día e internet crece a pasos agigantados.
Los sitios webs no solo hacen posible el intercambio de información científica, hoy nos permiten escribir sobre nuestros gustos y compartirlos en blogs o montar negocios y tener una tienda online sin necesidad de invertir en infraestructura. Las funcionalidades y los usos que podemos darles se han vuelto realmente amplios e incluso es posible construir páginas web propias en minutos.
Las webs actuales ya permiten incorporar todo tipo de contenido multimedia y varían de una a otra aunque todas se ven, cada vez más, en la necesidad de adaptarse a los dispositivos móviles que captaron al mundo.
¿Qué páginas web se crearán en el futuro? ¿Qué tendencias de diseño nos esperan? ¿con qué fines se utilizarán? ¿Cuáles serán las más famosas?
Las webs que hoy ya triunfan son las que impulsan modelos e ideas transformadoras, tienen diseños originales e impactantes, una estructura pensada para que los buscadores las visibilicen en los primeros resultados de búsqueda y aquellas que mejor entienden a su audiencia.
Si tienes una página web o siempre quisiste una, encuentra la inspiración que necesitas y recuerda: No se puede predecir el futuro ¡Así que invéntalo!
